El masaje y la contractura muscular de espalda
La espalda, es una parte muy importante de nuestra anatomía. Es el tronco principal del árbol que forma nuestro cuerpo, y muchas veces ni la cuidamos ni le hacemos el caso que realmente se merece.
Las diferentes partes que la componen nos proporcionan estructura, sostén, protección y capacidad de movimiento. Pero no tenemos que contemplar la espalda como algo independiente del resto de cadenas musculares, sino que otras estructuras y grupos musculares influencian directa o indirectamente sobre ella. Desde los músculos plantares del pie, pasando por la parte trasera de las piernas con sus isquio-tibiales, los glúteos, la región lumbar, los paravertebrales, los romboides, las dorsales, los trapecios… todos forman una cadena funcional conectada.
La musculatura de la espalda tiene que estar fuerte pero flexible, con tono pero relajada; al igual que los músculos de las piernas que nos sostienen y que tanta relación tienen con ella.
Causas principales de las contracturas de espalda
Es muy habitual tener dolores de espalda debido a tensión, que originan contracturas musculares funcionales y rigidez. Esto se debe a que existe una cierta tendencia a que ésta se vaya tensando con el paso del tiempo. En la contractura, un músculo o varios quedan permanentemente retraídos y no son capaces de volver por sí mismos al estado de relajación.
Existen ciertos factores que favorecen la acumulación de tensión y la aparición de una contractura muscular:
- Sobrecargas en el trabajo o en prácticas deportivas
- Movimientos corporales forzados o incorrectos con cargas
- Malas posturas frecuentes y/o duraderas, mala higiene postural general
- Debilidad de la musculatura abdominal
- Pisar incorrectamente
- Bruxismo nocturno durante el sueño
- Factores emocionales como estrés de larga duración y otros
- Forma de respirar incorrecta
- Factores viscerales
- etc.
Pero también pueden darse otros motivos que causen tensión, dolor y contracturas de la espalda. Ocurre en los casos de padecer:
- Escoliosis
- Hernia o protusión vertebral
- Hipercifosis y/o hiperlordosis…
En estos últimos casos, existe una alteración de fondo que provoca la tensión muscular, y por ello no podemos hablar de contracturas funcionales. De todas formas, factores como los comentados anteriormente (estrés, pisar incorrectamente…) también pueden influir y hacer que el cuadro de una escoliosis o hernia empeore.